
domingo, 13 de diciembre de 2009
viernes, 4 de diciembre de 2009
it's alive!
El último posteo es del 1º de octubre y encima por error.
¿Qué nos ha pasado? ¿Es que ya no tenemos nada para decir? ¿Será que ya superamos el viaje y no nos genera la vieja y querida patada en el estómago el escuchar una cierta tonada familiar? Are we alive? Dicen que todo se supera, pero es que simplemente hay demasiado como para empezar a olvidar. Les dejo un pequeño compendio de recuerdos. Como dice Charly, "Por favor, lloren".
Bueno, como era de esperarse, la letra chica no se lee. Maldito video, estuve días para poder bajarle la resolución y así poder subirlo. Bueno, la gente que me conoce podrá ver las versión divertida con subtítulos. Si no igual disfruten la música y las imágenes. Me quedé como hasta las 4 de la mañana la otra vez editando. Bien.
¿Qué nos ha pasado? ¿Es que ya no tenemos nada para decir? ¿Será que ya superamos el viaje y no nos genera la vieja y querida patada en el estómago el escuchar una cierta tonada familiar? Are we alive? Dicen que todo se supera, pero es que simplemente hay demasiado como para empezar a olvidar. Les dejo un pequeño compendio de recuerdos. Como dice Charly, "Por favor, lloren".
Bueno, como era de esperarse, la letra chica no se lee. Maldito video, estuve días para poder bajarle la resolución y así poder subirlo. Bueno, la gente que me conoce podrá ver las versión divertida con subtítulos. Si no igual disfruten la música y las imágenes. Me quedé como hasta las 4 de la mañana la otra vez editando. Bien.
jueves, 1 de octubre de 2009
miércoles, 23 de septiembre de 2009
pequeños descubrimientos in(útiles)
A veces uno no encuentra las palabras... a veces las palabras lo encuentran a uno, esperando que el momento sea el apropiado.

Están los lugares más significativos, y nos recuerdan todo. Quizás simplemente les inventamos una historia que nos haga sonreir...


Muchas veces las palabras sobran, porque las imágenes son tanto o más elocuentes.



Otras tantas veces no precisamos de nada: ni de palabras, ni de imágenes, ni siquiera de música... Nada... Los recuerdos aparecen. Porque están al acecho, esperando algún momento de debilidad que nos haga recurrir a ellos, sin ninguna ayuda...
Están los lugares más significativos, y nos recuerdan todo. Quizás simplemente les inventamos una historia que nos haga sonreir...
Muchas veces las palabras sobran, porque las imágenes son tanto o más elocuentes.
Otras tantas veces no precisamos de nada: ni de palabras, ni de imágenes, ni siquiera de música... Nada... Los recuerdos aparecen. Porque están al acecho, esperando algún momento de debilidad que nos haga recurrir a ellos, sin ninguna ayuda...
lunes, 21 de septiembre de 2009
Gualicho de olvidar
Para Ele… porque olvidarse de las cosas hace posible que te vuelvan a sorprender
Para todos los que me "prestaron" sus fotos en esta ocasión... con permiso...
Para todos los que me "prestaron" sus fotos en esta ocasión... con permiso...
“Cerré los ojos, los abrí. Entonces vi el Aleph.
…
Vi el populoso mar, vi el alba y la tarde, vi las muchedumbres de América, vi una plateada telaraña en el centro de una negra pirámide, vi un laberinto roto (era Londres), vi interminables ojos inmediatos escrutándose en mí como en un espejo, vi todos los espejos del planeta y ninguno me reflejó, vi en un traspatio de la calle Soler las mismas baldosas que hace treinta años vi en el zaguán de una casa en Frey Bentos, vi racimos, nieve, tabaco, vetas de metal, vapor de agua, vi convexos desiertos ecuatoriales y cada uno de sus granos de arena, vi en Inverness a una mujer que no olvidaré, vi la violenta cabellera, el altivo cuerpo, vi un cáncer de pecho, vi un círculo de tierra seca en una vereda, donde antes hubo un árbol, vi una quinta de Adrogué, un ejemplar de la primera versión inglesa de Plinio, la de Philemont Holland, vi a un tiempo cada letra de cada página (de chico yo solía maravillarme de que las letras de un volumen cerrado no se mezclaran y perdieran en el decurso de la noche), vi la noche y el día contemporáneo, vi un poniente en Querétaro que parecía reflejar el color de una rosa en Bengala, vi mi dormitorio sin nadie, vi en un gabinete de Alkmaar un globo terráqueo entre dos espejos que lo multiplicaban sin fin, vi caballos de crin arremolinada, en una playa del Mar Caspio en el alba, vi la delicada osadura de una mano, vi a los sobrevivientes de una batalla, enviando tarjetas postales, vi en un escaparate de Mirzapur una baraja española, vi las sombras oblicuas de unos helechos en el suelo de un invernáculo, vi tigres, émbolos, bisontes, marejadas y ejércitos, vi todas las hormigas que hay en la tierra, vi un astrolabio persa, vi en un cajón del escritorio (y la letra me hizo temblar) cartas obscenas, increíbles, precisas, que Beatriz había dirigido a Carlos Argentino, vi un adorado monumento en la Chacarita, vi la reliquia atroz de lo que deliciosamente había sido Beatriz Viterbo, vi la circulación de mi propia sangre, vi el engranaje del amor y la modificación de la muerte, vi el Aleph, desde todos los puntos, vi en el Aleph la tierra, vi mi cara y mis vísceras, vi tu cara, y sentí vértigo y lloré, porque mis ojos habían visto ese objeto secreto y conjetural, cuyo nombre usurpan los hombres, pero que ningún hombre ha mirado: el inconcebible universo."
Vi la ciudad
vi las montañas
vi el desierto vi nieve
vi pececitos de colores
vi el centro de europa
vi el borde de europa
Subí una escaleraescalé una pirámide
bajé un cañónatravesé una muralla.
Encontré a Miesjugué a los Beatles
... me tomé una en el bar de al lado
entré al educatoriumAnduve en bote
me bajé de un tren
viví en una casa
viví en un carromato
sentí el rigor
"En la calle, en las escaleras de Constitución, en el subterráneo, me parecieron familiares todas las caras. Temí que no quedara una sola cosa capaz de sorprenderme, temí que no me abandonara jamás la impresión de volver. Felizmente, al cabo de unas noches de insomnio me trabajó otra vez el olvido.”
Y aunque hacemos lo posible por registrarlo todo, por suerte siempre algo se escapa, y queda escondido para siempre...
viernes, 11 de septiembre de 2009
know.how
para Suzette, feliz cumple

Riding on this know-how
Never been here before
Peculiarly entrusted
Possibly that's all
Is history recorded
Does someone have a tape
Surely, I'm no pioneer
Constellations stay the same
Just a little bit of danger
When intriguingly
Our little secret
Trusts that you trust me
'Cause no one will ever know
That this was happening
So tell me why you listen
When nobody's talking
Oh oh oh
What is there to know
All this is what it is
Oh oh oh
You and me alone
Sheer simplicity
Oh oh oh
What is there to know
All this is what it is
Oh oh oh
You and me alone
Sheer simplicity
Oh oh oh
What is there to know
All this is what it is
Oh oh oh
You and me alone
Sheer simplicity
Know How
Kings Of Convenience con Feist
Kings Of Convenience con Feist
sábado, 5 de septiembre de 2009
(media) vuelta al mundo en un par de días
a 3 días de irme: prueba de piano. yo pensaba que me había filmando dando mi maravilloso concierto y esto fue lo único que registré. una foto. torcida. ya con la cabeza en otro lugar.

a dos días de irme: revuelo, mucho revuelo. todo tirado. nada pronto. se empieza a llenar la mochila, pero con cosas que cada vez más me doy cuenta que no necesito.
el día antes de irme: regalos de las Schepitas. armas de defensa personal, de las heavy. libretitas animadas. post-its de vaca. fotos. chocolates. lápices de labios y pinturas de uñas. marcalibros. música. libros de mi infancia en francés. cartitas. postales. pins. risas. llanto. muchos recuerdos. más llanto. se empiezan a mezclar los regalos con mis pertenencias anteriores. ya no sé qué vino antes y qué vino después. pero aviso que los regalitos llegaron bien. incluido el Mace (sí, el spray de la foto, regalo de María).
a horas: todo sigue igual. más un pedazo de torta de manzana de mi mamá, a medio comer entre el caos.
a escasos minutos de la partida: valijas a medio hacer. las sputnik, mis botas plateadas de campamento, a punto de despegar.
a nada: disfrutando de una vista privilegiada del avión desde la sala VIP del aeropuerto. comida y bebida gratis.
finalmente: me acomodo en mi amplia butaca en business class (gracias al inventor del cliente rubí, whatever that is), me tomo un par de copas de todo lo que me ofrecen, miro una peli, juego unos juegos y me dispongo a dormir. imposible registrarlo en fotos. voy sola y las autofotos están mal vistas en primera. me adapto a la situación (no sin antes cubrir mi cara con un pañuelo para evitar los estragos del aire acondicionado en mis vías respiratorias, calzarme tapaojos y auriculares, e intentar hacer de cuenta que no voy a millones de kilómetros de altura).
ok, mentí. saqué un par. sí, lo confieso, con flash. de noche. en la oscuridad de la business class, mientras los empresarios dormían. y yo haciendo pavadas.

bueno, ahora ya llegué. hasta pronto.
a dos días de irme: revuelo, mucho revuelo. todo tirado. nada pronto. se empieza a llenar la mochila, pero con cosas que cada vez más me doy cuenta que no necesito.
el día antes de irme: regalos de las Schepitas. armas de defensa personal, de las heavy. libretitas animadas. post-its de vaca. fotos. chocolates. lápices de labios y pinturas de uñas. marcalibros. música. libros de mi infancia en francés. cartitas. postales. pins. risas. llanto. muchos recuerdos. más llanto. se empiezan a mezclar los regalos con mis pertenencias anteriores. ya no sé qué vino antes y qué vino después. pero aviso que los regalitos llegaron bien. incluido el Mace (sí, el spray de la foto, regalo de María).
a horas: todo sigue igual. más un pedazo de torta de manzana de mi mamá, a medio comer entre el caos.
a escasos minutos de la partida: valijas a medio hacer. las sputnik, mis botas plateadas de campamento, a punto de despegar.
a nada: disfrutando de una vista privilegiada del avión desde la sala VIP del aeropuerto. comida y bebida gratis.
finalmente: me acomodo en mi amplia butaca en business class (gracias al inventor del cliente rubí, whatever that is), me tomo un par de copas de todo lo que me ofrecen, miro una peli, juego unos juegos y me dispongo a dormir. imposible registrarlo en fotos. voy sola y las autofotos están mal vistas en primera. me adapto a la situación (no sin antes cubrir mi cara con un pañuelo para evitar los estragos del aire acondicionado en mis vías respiratorias, calzarme tapaojos y auriculares, e intentar hacer de cuenta que no voy a millones de kilómetros de altura).
ok, mentí. saqué un par. sí, lo confieso, con flash. de noche. en la oscuridad de la business class, mientras los empresarios dormían. y yo haciendo pavadas.
bueno, ahora ya llegué. hasta pronto.
martes, 25 de agosto de 2009
No importa el lugar
No importa el lugar: siempre vamos a hablar en el mismo tono chillón y vamos a ir igual vestidas... siempre vamos a querer consumir exageradamente y vamos a querer bailar solas alrededor de una mesa...
Que el título de este posteo no confunda. No tiene nada que ver con los enanitos verdes y nada de esa basura sobre la amistad.
Es sólo que desde hace algún tiempo tengo la impresión de que cada vez nos importa menos el lugar en donde estemos. Ya lo había empezado a sospechar en Porto, durante aquel asado eterno. Me volvió la inquietud cuando vi que las opciones para este fin de semana eran la playa, el campo o Argentina interior profunda. Y lo confirmé cuando vi las fotos y me di cuenta que podrían ser de cualquier lugar del mundo.
Es sólo que desde hace algún tiempo tengo la impresión de que cada vez nos importa menos el lugar en donde estemos. Ya lo había empezado a sospechar en Porto, durante aquel asado eterno. Me volvió la inquietud cuando vi que las opciones para este fin de semana eran la playa, el campo o Argentina interior profunda. Y lo confirmé cuando vi las fotos y me di cuenta que podrían ser de cualquier lugar del mundo.
Y no es que no queramos disfrutar del paisaje. Es sólo que el universo une todas sus fuerzas para que no lo hagamos. A continuación, las pruebas:
Siempre había cosas más importantes que mirar:
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