ingalls on the road

Convengamos que últimamente escuchar la música de Amelie no ayuda... mirando el blog de nuestra amiga elenabella con este soundtrack, me vuelvo a sorprender con otra casualidad... y empiezo a pensar que nuestra amiga americana es una schepita lejana (y por ende también es Bridget) y todo eso... En fin, todas sabemos el vínculo que nos une con las divinidades de la India, y al leer lo que sigue en el blog de Elena, no sé... se me viene a la cabeza que, como todo, también me hace acordar al viaje. Seguro que de alguna forma u otra ustedes le ven la conexión.

And John told us, one day in class, a story from Hindu mythology, about poisonchanging, in which Krishna was said to have swallowed poison, and transformed it inside himself into divine song. The significance, or usefulness, of the story didn't really sink into me at the time, though I kept it with me, and over the years I've come to understand it as a useful metaphor for what poets are sometimes able to do -- to take the poisons and terrors of the world, and through the making of poems -- through telling the truth in poems -- change terrible experience into something good and beautiful and essential.

Cierto, nuestra experiencia no fue terrible ni nada que se le parezca. Pero ninguna puede negar haber tenido sus momentos... aunque sea ahora, en la posguerra. Así que para mí se trata de tomar todo lo que hemos vivido... y convertirlo en algo mejor a través del recuerdo. Y todas tenemos algún que otro bolsito lleno de ellos...

(a.k.a. un homenaje a la mochila, que cual caparazón de tortuga se prendió de nuestras espaldas para no soltarse jamás, o al bolso cruzado, por tironear de forma asimétrica y albergar más cosas que el de Mary Poppins: cámara, billetera, dínamo, pasaporte, buzo, pañuelo, perifar, botella de agua, banana, galletitas, yogur, lata de cerveza, botella de vino, papel higiénico, cepillo y pasta de dientes, medias, pins, carnés de prensa truchos, celular, ipod, desodorante, lentes de sol, llave del auto...)